¡Mirame!
¡Acá! A los ojos
Lo que vayas a decir
a mi pupila
Endulzate con la salvaje miel
de mi mirada
y hablale a mis ojos sin temores.
No rehuyas la vista,
¡Volvé a mirarme!
No han de dañarte
es mi promesa.
Quiero tus ojos en los míos
y adivinar en el brillo el sentimiento.
Deja que entre ellos se comprendan.
Dejate enamorar,
que ellos te hablen que
te digan de mí, de mis sentires.
¡Mirame Mujer!
Dales permiso.
Ellos sabrán
y si me miran, seguro
que yo también he de saber.